domingo, 10 de junio de 2012

Los del Suquia - DEL ALBUM DE MI ABUELA



Ha ido a parar al altillo o al baúl de los recuerdos, envuelto, quizás, en papel de seda -nada de groseros plásticos- para preservarlo del polvo conque se anuncian, molestos, los nunevos tiempos.

Es un álbum de fotografías, casi diría, de daguerrotipos. En tono sepia, las imágenes muestran la ahora pintoresca galería familiar, que integran primos y porimas -alguna de ellas, la pecosa, nos hacía suspirar románticamente, nunca nadie, ni siquiera ella, se enteró- inolvidables tíos, buena cantidad de cuñados -alguno de ellos dejó de serlo- amigos, instantáneas de pic-nics en Alta Gracia, Río Ceballos, Villa Allende o un safari a Villa General Mitre, los pueblos de moda antaño y alguna que otra excursión de domingo a Chacras de la Merced y auqellos paseos formidables, excitantes, al Parque Sarmiento, cuando a bordo de un mateo -perdón, de un coche de plaza- nos sentíamos dueños del mundo y sus alrededores.
Dueños dela Córdoba pre-industrial, al menos, en la que se fueron llenando con paciencia de abuela esas prolijas hojas; cada foto cuidadosamente ceñida por cuatro esquineros dorados, ni un resto de engrudo.
Ciudad aquella que crecía, claro, de este lado de los campanarios azules, pero todavía conservaba, por ejemplo, algunas instituciones ambulantes imprescindibles: el yuyero serrano, el lechero que vendía al pie de Aurora, el Aguatero y su carro que traía su húmeda mercadería en un tambor que cargaba en el misterioso "Pozo San Martín", el vendedor de arropes. Córdoba de misa de siete, de las barras estudiantiles que servían para divertir o escandalizar, pero también para producir la Reforma. Córdoba de las "chupinas" -rabonas, ratas o yutas en otras partes del país- por las que, una vez descubiertas recibíamos -también eran memorables- palizas de las de antes. Ciudad que, sin veda, comía sus asados y sus empanadas dulces, a veces a orillas del entonces romántico Río Primero -o Suquía , si se prefiere. Revolucionaria legítima, más allá de sus broncas explosivas entre radicales y conservadores, ámbito puro de la política nacional, allí donde alumbró su bohemia y su formidable visión Deodoro Roca.
En fin, personajes y sucesos de la añeja villa que apenas entrevimos y que ahora, cuando cumple cuatro siglos, sigue siendo igual, aunque las garras del smog y su contorno filosófico le amenacen.
Es que hoy mismo somos serenateros, como buena parte de los provincianos.
Y hoy mismo, si, decidimos ir con las guitarras adonde la abuela. No la encontramos. Curiosamente entonces en el altillo o en el arcón de que hablabamos al comienzo, hallamos el álbum.
Y entonces, simplemente, lo cantamos.

LOS DEL SUQUIA


Los del Suquía
DEL ALBUM DE MI ABUELA
MICROFON SE-397
1973

01. DEL ALBUM DE MI ABUELA - canción - Néstor César Miguens, Miguel Angel Gutierrez
02. LLORANDO ESTOY - vidala chayera - motivo popular
03. ZAMBA PARA UN RECUERDO - zamba - Guillermo Estarque
04. RESPONSO POR CHACARERA - chacarera - Eduardo Andrade
05. EL VIOLIN DE ROBERTITO - vals - Marcelo Quintero
06. SERENATA ROMANCERA - canción - Irma Lacroix Indiana
07. TE PIDO QUE LO PIENSES - canción - Hugo Videla
08. MUCHACHOS, DONDE ES LA SERENATA - vals - Ricardo Sandoval, Armando Freyre
09. SOLO - zamba - Luis Val
10. AMOROSA - cueca - Azor Grimaut
11. CANCION DE LOS ANDENES - canción - Luis Menu, Hugo Ovalle
12. AMOR DEL VALLE FRUTAL - carnaval cruceño - Eduardo Andrade


http://www.mediafire.com/?gyx08g77nhrh8

1 comentario:

Unknown dijo...

Muy buen aporte! Muchas gracias le encanto a mi padre! Gracias!